Años 80

Nací el 14 de noviembre de 1983 y desde que tengo recuerdos las gaiatas forman parte de mi vida de una forma poco habitual. Mis padres no son castellonenses, y mucho menos castelloneros, por lo que en mi casa la cultura y costumbres locales las aprendimos en familia de forma simultánea.

Cada semana grande, mis padres me llevaban al desfile de gaiatas y casi siempre lo "sufríamos" con ilusión hasta el final pues la gaiata de nuestro barrio, la 1, el Brancal de la Ciutat, desfilaba la última. No me quedan ya muchos recuerdos, pero los que persisten en mi memoria me resultan entrañables: las gaiatas que por entonces se enchufaban en postes repartidos por todo el recorrido, la larga duración del acto, las luces, los colores, el frío...

Todavía no existía la "encesa de gaiates" y el lunes al despertar lo primero que hacía era correr a la ventana del salón para ver si la gaiata estaba ya en su sitio. Había que bajar a escudriñarla y fijarse bien en los detalles. Durante el resto de la semana, la dibujaría, y luego haría mis propios "bocetos". Tenía muy claro que algún día haría una gaiata.

Esta pasión que me acompaña desde pequeño jamás he conseguido explicármela , pues carezco de cualquier raíz que la justifique. Pero me gusta imaginar que al ser nieto de ebanista e hijo de ingeniero en telecomunicaciones quizá el espíritu de las gaiatas vaya escrito en mi ADN.

Años 90

En esta época empecé a interesarme por la tecnología. Vivir en una casa donde siempre ha habido ordenadores me permitió aprender muchas cosas en unos años en los que sólo existían 2 canales de televisión.

Realicé infinidad de dibujos por ordenador, no sólo gaiatas, con programas como el paint brush y otros aún más antiguos. Al mismo tiempo mis padres, viendo que no era muy habilidoso con las manos, me compraron meccanos y otros juegos de construcciones. Y así fue como construí mis primeras maquetas y aprendí unos conceptos básicos de electricidad pues todas ellas estaban iluminadas con diodos LED.

En el colegio, cada vez que los profesores pedían que dibujásemos una gaiata o que construyésemos una maqueta, me lo tomaba realmente en serio. La verdad es que mis ideas no eran excepcionales, ni mucho menos, pero yo seguía con la misma ilusión fijándome en aquellos que lo hacían mejor.

Desde pequeño tenía claro que quería ser ingeniero, arquitecto, informático, o algo similar, así que mi padre me enseñó a programar en Basic y de este modo a los 12 años realicé un programa tipo calculadora, y un par de "bromas informáticas" quizá no tan inocentes.

El momento más destacado llegó en 1998 cuando a través de la Familia Renau Miralles se presentó la oportunidad de mostrar mis bocetos al por entonces presidente de la gaiata 1 Rafael Zafón. Fue ese año cuando empezó realmente a cumplirse el sueño.

Anécdota

En el cole construimos uno de mis bocetos con cajas de cartón. Salió fatal y aprendí que no es nada fácil pasar de un dibujo a una realidad.

Frase célebre

Tanto que te gustan las gaiatas, ¿y nunca te vistes con traje regional?Mis compañeros del cole

Anécdota

Mis primeros dibujos en ordenador los realicé con un programa que sólo podía dibujar líneas rectas. Recuerdo que dibujé un ordenador con su teclado (no había ratón).