2013 se convirtió en el año en el que más gaiatas he realizado.
Por una parte continuamos trabajando para la gaiata 19 ya que Sara se encargó de la infantil y yo de la mayor.
Al mismo tiempo, el presidente de la gaiata 6 y también artista gaiatero Esteban Gual, me pidió que tallara la madera de su monumento.
Y ya casi en diciembre, y de forma inesperada acepté construir en tiempo récord una gaiata infantil para la gaiata 1 junto con mi amigo Álex Renau que había cambiado de comisión. Esto supuso mi retorno al sector donde empezó todo y que me permitió cumplir una vieja promesa: regresar para ganar un premio.
Cuando Álex y yo dibujamos aquella infantil tuve la certeza de que esta vez ganaríamos un buen premio, pero lo que nadie supo entonces es que en mi opinión, la gaiata de Sara era mucho más completa e innovadora pues incorporaba unas tiras LED entre unas maderas en forma de ondas que hacían un efecto realmente novedoso.